Beneficios y contraindicaciones
La práctica está recomendada prácticamente para cualquier edad y sexo.
Sus beneficios influyen tanto en el plano físico como en el mental. Por un lado, aprendiendo el control de la energía del cuerpo y por otro, las mejoras físicas que ésto nos aporta.
Sus beneficios influyen tanto en el plano físico como en el mental. Por un lado, aprendiendo el control de la energía del cuerpo y por otro, las mejoras físicas que ésto nos aporta.
La energía vital (o Chi) es un elemento clave en nuestro bienestar. El hecho que fluya de forma correcta a través de los meridianos de nuestro cuerpo nos aporta bienestar. Por el contrario, enfermamos cuando fluye de manera incorrecta.
La práctica continuada nos permite localizar y canalizar de forma adecuada la energía vital de nuestro organismo para conseguir la perfecta armonía entre nuestros plano físico y mental, sincronizamos con el resto del universo, canalizando nuestra energía hacia el exterior...
Podemos destacar los siguientes:
La práctica continuada nos permite localizar y canalizar de forma adecuada la energía vital de nuestro organismo para conseguir la perfecta armonía entre nuestros plano físico y mental, sincronizamos con el resto del universo, canalizando nuestra energía hacia el exterior...
Podemos destacar los siguientes:
- Reduce considerablemente los niveles de estrés y ansiedad, debido al control de la respiración necesario para la realización de los ejercicios.
- Mejora la flexibilidad y resulta bastante eficaz a la hora de combatir la artritis o problemas y dolores musculares.
- Estimula el sistema cardiovascular aunque, al tratarse de movimientos suaves y de ejercicios en su mayoría anaeróbicos, también controla la presión arterial.
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